El hígado es la víscera de mayor tamaño del organismo y su peso en el individuo adulto es de unos 1500 gr. Ocupa una posición fisiológica fundamental, pues se halla interpuesto entre la corriente sanguínea que proviene del intestino y el resto del organismo.
Las vias biliares constituyen el sistema colector por el que fluye la bilis desde el hígado hasta la luz duodenal. Consiste en una extensa trama de conductos intrahepáticos de calibre progresivamente mayor, que confluyen en los Conductos Hepáticos Izquierdo y Derecho, los cuales se unen en el Conducto Hepático Común. Este se une con el Conducto Cístico, que es el que drena la Vesícula Biliar y ambos se continúan en el Coledoco que desemboca en el Duodeno.
Las células hepáticas principales, los hepátocitos, aseguran dos grandes funciones, una función de síntesis y una función de excreción:
En ellos se pueden sintetizar un gran número de sustancias: proteínas, glúcidos, lípidos y urea. La insuficiencia hepatocelular o insuficiencia hepática se traduce en una reducción de estas funciones de síntesis.
Tras la transformación metabólica en el hepatocito, algunas sustancias son eliminadas a través de la orina (esta vía es utilizada por muchos medicamentos). La otra vía de eliminación es a través de la bilis. La bilis, producida en el hígado, se almacena en la vesícula biliar hasta que pasa al duodeno.
Tomar 1 cápsulas antes de cada una de las principales comidas.
Envase de 60 cápsulas.